En La Gineta, lo que nos hace únicos es nuestra dedicación a ofrecer una experiencia auténtica que cautiva los corazones de nuestros huéspedes desde el momento en que llegan. Lo que nos distingue de los demás alojamientos es que el nuestro es un antiguo cortijo andaluz restaurado con esmero, donde cada piedra y cada rincón cuentan una historia. La autenticidad de nuestro entorno y las diferentes casas refleja la esencia de la cultura andaluza. Ofrecemos un generoso espacio alrededor de nuestras casas para que nuestros huéspedes puedan disfrutar de la serenidad y la belleza del campo andaluz. Además, a pesar de estar en pleno campo, nuestros accesos por carretera son excepcionales, lo que garantiza que nuestros huéspedes puedan llegar cómodamente y disfrutar de la tranquilidad sin complicaciones. Nuestra premisa es que nuestros huéspedes se sientan como en casa, por eso tratamos de recibir personalmente a los huéspedes y ofrecerles una atención personalizada durante toda su estancia. Estamos aquí para hacer que se sientan especiales y atendidos. Cada una de nuestras casas es independiente, lo que proporciona a nuestros huéspedes la privacidad que desean para relajarse y sentirse como en casa. A pesar de nuestra autenticidad histórica, nuestras casas están equipadas con todas las comodidades modernas para garantizar una estancia confortable. En La Gineta, nos enorgullece ofrecer una experiencia rural auténtica donde la historia se encuentra con la hospitalidad. Nuestra misión es que nuestros huéspedes no solo visiten Andalucía, sino que la vivan como si fuera su propio hogar. ¡Te esperamos con los brazos abiertos!

¡Hola! Soy Magdalena López y junto con mis padres, Antonia y Felipe, somos los anfitriones de La Gineta. Permíteme contarte un poco sobre nosotros y lo que nos hace apasionados anfitriones de este encantador alojamiento rural. La naturaleza ha sido una fuente constante de inspiración en nuestras vidas. Los vastos campos y paisajes de Andalucía siempre han sido nuestro refugio y nuestro lugar de conexión. El alojamiento que hoy conoces como La Gineta es el cortijo familiar donde mi padre nació y se crió, y este lugar tiene un significado especial en nuestras vidas. Como agricultores, hemos cultivado un profundo respeto por la tierra y la vida rural, y hemos encontrado en La Gineta la oportunidad perfecta para compartir esta pasión con nuestros huéspedes. Lo que más nos llena de alegría es conocer gente nueva, escuchar sus historias y compartir experiencias. Nuestra hospitalidad no es solo un deber, es una verdadera vocación. Estamos aquí para hacer que tu estancia sea inolvidable y te sientas como en casa desde el momento en que llegues. En La Gineta, encontrarás un lugar donde la autenticidad de la Andalucía rural se combina con el calor humano de nuestra familia. Estamos ansiosos por recibirte, ayudarte a descubrir los tesoros de esta región y compartir nuestra pasión por la naturaleza y la cultura andaluza contigo. ¡Bienvenido a La Gineta, tu hogar lejos de casa!

El Cortijo La Gineta está situado en Alcalá la Real es el punto de partida perfecto para explorar las icónicas ciudades de Granada, Córdoba y Jaén, así como otros hermosos pueblos colindantes, como Priego de Córdoba o Montefrío. Desde aquí, podrás sumergirte en la rica historia y los impresionantes paisajes de la región. En Alcalá la Real, tierra de frontera a lo largo de la historia, te invitamos a explorar la majestuosidad de la Fortaleza de la Mota, una ciudad fortificada asombrosamente conservada que alberga tesoros como la iglesia Abacial, las intrigantes galerías subterráneas de la Ciudad Oculta o la imponente alcazaba. Aquí, es fácil imaginar cómo era la vida en la frontera entre el Reino Nazarí y el Reino de Castilla. Además, Alcalá la Real cuenta con hermosos monumentos y barrios llenos de historia, como el Llanillo, la Iglesia de Consolación, el Palacio Abacial o el barrio de las Cruces. Para una experiencia aún más enriquecedora, existen empresas locales que ofrecen visitas guiadas que te sumergirán en la historia y la cultura de la región. Los amantes de la naturaleza encontrarán aquí un paraíso, con rutas de senderismo señalizadas que incluyen la impresionante Ruta de los Zumaques y el apacible sendero junto al Río Velillos, que comienza prácticamente en la puerta de nuestro alojamiento rural. Moclín, otro pequeño pueblo con un enorme encanto, también merece una visita. Aquí podrás disfrutar de una de las mejores rutas de senderismo de la zona, la Ruta del Gollizno. Además existe la posibilidad de realizar diversas actividades de aventura, como escalada y una espectacular vía ferrata. En la vecina localidad de Castillo de Locubín, la primavera y el verano ofrecen la oportunidad perfecta para visitar el nacimiento del Río San Juán, un oasis natural con refrescantes pozas ideales para el baño. Los alrededores cuentan con áreas verdes perfectas para un picnic, así como una emocionante vía ferrata de nivel fácil para los más intrépidos.